La batalla contra reducir kilos de más tiene varias vertientes, no se trata sólo de voluntad, pero nada es imposible.

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Por Redacción Fitness

Las personas con sobrepeso (aquellos que tienen hasta el 10 por ciento de su peso idóneo) y quienes padecen obesidad (arriba de ese 10%) enfrentan distintos problemas para perder esos kilos de más y usualmente son focos de críticas, ya que se les califica de poca voluntad, pero diversos estudios han determinado que el problema es más complejo y, sí, la voluntad es importante, pero también las rutinas alimenticias, el ejercicio y los aspectos biológico y fisiológicos.

Un artículo en la sección de Salud y Ciencia del Washington Post, escrito por David Prologo, se destaca un aspecto importante de Lee Kaplan, director del Centro de Peso de Massachusetts de la Escuela de Medicina de Harvard, que dijo: "Debemos dejar de pensar en la dieta Twinkie y comenzar a pensar en la fisiología. El ejercicio altera las preferencias alimentarias hacia alimentos saludables... y el músculo sano entrena la grasa para quemar más calorías".

Sin embargo, esa transición cuesta trabajo a cada persona, porque, como los médicos dicen, cada caso es un caso, aunque hay determinantes que se han generalizado, según el artículo del Post, las siguientes serían esas razones que dificultan la pérdida de peso.

1. El cuerpo se resiste.- La mayoría de los programas para pérdida de peso, en el papel, suenan perfectos, pero no son necesariamente viables para gente real. "Los pacientes con sobrepeso y los obesos no tienen la capacidad de quemar calorías para perder peso en forma sostenible", indica Prologo. Un dato importante es que el cuerpo se resiste a restringirse de esas calorías extra, basadas en un principio de "supervivencia". "Si hay menos para comer, será mejor que conservemos nuestras reservas de grasa y energía para no morir", se agrega. "El cuerpo envía oleadas de hormonas del hambre que inducen el comportamiento de búsqueda de alimento, creando una resistencia real y mensurable a esta amenaza percibida de inanición". 

2. Las calorías funcionan distinto.- Prologo señala que la microbiota en los intestinos son distintas, de ese modo el principio de "una caloría es una caloría" ya no es verdad, entonces, cuando una persona con sobrepeso y obesa afirma consumir la misma cantidad de comida que su homólogo delgado: "hay que creerle". En ese sentido, las calorías son procesadas en diferente forma por el cuerpo.

3. La vergüenza.- Las personas con sobrepeso u obesidad tienen la presión de "tener que bajar esos kilos de más", dejando de comer y haciendo ejercicio, lo que les genera ansiedad, por lo que una forma de romper esa barrera es enfrentar la presión: cada quien tiene su tiempo y hay que buscar formas alternativas. 

En ese sentido, el autor sugiere que las personas con obesidad acepten que es posible ayudarse con una cirugía, porque minimizan la barrera biológica que se ha explicado, ya que "alteran los niveles hormonales y los cambios metabólicos que conforman la barrera de entrada... y conducen a la pérdida de peso", aunado a que preparan el cuerpo para hacer ejercicio con más facilidad.

El mayor problema para perder peso lo enfrentan las personas obesas, ya que quienes tienen sobrepeso pueden comenzar una dieta moderada y hacer ejercicio con mayor facilidad.

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