Resulta eficaz para manejar conductas neuróticas, autodestructivas.

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 Escrito para Fitness por Ximena Olivia Icelo Cabello

El origen de la palabra Gestalt viene del alemán que significa totalidad, unidad, compuesta por dos elementos unificados: figura y fondo.

La terapia Gestalt es existencia y fenomenología. Esto hace ver a la persona como está viviendo y creándose así misma en este momento y en este lugar.

La existencia se antepone a la esencia: Las personas se crean a si mismas y se responsabilizan de sus acciones.

La fenomenología describe a través de los gestos conductuales, expresiones, humor, etc.

La labor de un terapeuta gestáltico es trabajar con el descubrimiento de la persona, familia y todo el entorno en el que se desenvuelven. Se experimenta con el proceso y expresiones de cada individuo, pues este es único.

Para comenzar a explicar más a fondo la Gestalt, abordaremos lo que es la figura y fondo, pues se ha demostrado que los individuos no perciben a las cosas como entidades aisladas sin relación entre ellas,  sino que las organiza en el proceso perceptivo en totalidades significativas. Por lo que esta terapia busca la percepción auditiva, visual, sentimental, emocional y sensaciones corporales.

El desarrollo de gestalts figura-fondo en las personas se debe a la importante cantidad de necesidades, que tienen los individuos por desarrollar nuevas figuras y fondos pues estas aparecen y desaparecen constantemente, esto es por que al ser satisfechas o cerradas, las eliminan y se reemplazan por otras.

La figura o Gestalt es siempre lo más sobresaliente lo emergente y el fondo es lo difuso o indiferenciado. Este proceso es lo que se le conoce en la gestalt como formación de figura. Una persona que ha tenido una buena formación de la figura gestáltica es aquella que su proceso se realiza de manera continua y sin interrupciones. Distinto a una persona que no logra satisfacer algunas necesidades o lo hace a medias hace que se interrumpa y trastorne el proceso. Es decir que las gestalts no han sido satisfechas y quedan inconclusas llevándonos a lo que se conoce como “ASUNTOS INCONCLUSOS”.

Los asuntos inconclusos son conductas o emociones no disponibles, que se quedan en el fondo molestando y observando hasta que la persona acabe con ellas, es decir hasta que cierre la persona ese ciclo y se obtenga una diferencia clara entre figura y fondo. Por lo que se puede tolerar vivir por un tiempo con estas molestias aun que tienden a extenderse y cuando llegan a tener suficiente poder, causan preocupación y angustia desencadenando toda una serie de actividades autodestructivas, si estos asuntos inconclusos son lo bastante fuertes y mientras no se logre el cierre o satisfacción o destrucción. El sujeto nunca podrá estar completamente pleno, por más éxitos que tenga en su vida.

El cierre se encuentra regresando a aquellos asuntos que se quedaron inconclusos relacionados con circunstancias semejantes del presente y una vez que se hayan podido apreciar en el presente, la preocupación desaparecerá y se podrá vivir plenamente.

Las personas presentan atención a cuestiones de importancia para su preservación y supervivencia. Este tiene necesidades que deben de ser satisfechas para vivir y lograr mantener un equilibrio. A este proceso de satisfacer las necesidades se le denomina “autorregulación orgásmica“. Permite al individuo interactuar y conectarse con su medio ambiente., para lograr esto la Gestalt trabaja con lo que se conoce “Darse cuenta”.

El darse cuenta consiste en darse cuenta de uno mismo, del ambiente, y del contacto de ellos en el presente, en el aquí y el ahora. El objetivo de esto es que se den cuenta las personas de lo que son y tiene cada uno. Además trata de acceder al individuo a que preste atención en un momento determinado a lo que siente, percibe y piensa con los sentidos.

La ideología de la Terapia Gestalt menciona que “toda terapia puede llevarse a acabo únicamente en el presente y cualquier otro modo constituye una interferencia“. Salir del presente es restar energía a la realidad y la mejor manera que permite comprender y permanecer en el ahora, es el darse cuenta, con el cual se descubre y se toma integra conciencia de cada experiencia real. La razón por la que la Gestalt menciona que la terapia hay que llevarla en el presente, es porque el pasado ya no está y el futuro aún no ha llegado. Sin embargo esto no quiere decir que a la Gestalt no le importe el pasado y ni le interese. El interés en el pasado y en el futuro es obviamente esencial en el funcionamiento de las personas, pero no el comportarse como si se siguiera viviendo en el pasado o en el futuro, intoxicando así las posibilidades vivenciales. Tienen importancia en circunstancias que surgen en el presente, en el aquí y el ahora.

El presente generalmente es causado por el pasado, pero el presente existe de todos modos por si mismo y así todo el pasado está presente de alguna manera. La terapia en el presente constituye una operación que pone barreras a la actitud de ir hacia el pasado cuando se ocupan las personas de problemas actuales o de asuntos potencialmente amenazadores.

En el presente es cuando funcionan los sistemas sensorio-motores y únicamente de las perspectivas de estas funciones puede hacerse tangible la experiencia presente. Un ejemplo de esto, es cuando se recuerda una pelea, se reacciona de manera corporal a través del sistema sensorio-motor. Lo que antes había sido oprimido, renace en el ahora, el completamiento de un asunto pendiente retorna a través del reconocimiento, la intensificación, y focalización continuada, hasta que la descarga motora disponible, solo en el presente, libere por fin a la persona.

La terapia Gestalt trata de facilitar a los individuos a desarrollar posibilidades para encontrar metas que le son significativas para el proceso de maduración.

El objetivo de esta técnica terapéutica es desarrollar y capacitar a los sujetos para que actúe sobre toda la base de información posible, que capte no solo los factores importantes del campo externo, sino también la información relevante interna, logrando con ello la autorregulación, tratando de llegar a ella por medio del darse cuenta en el aquí y el ahora.

Se enseña a las personas a que presten atención a sus sentimientos, deseos, a lo que hacen por alcanzar una conciencia ininterrumpida, y descubrir de que manera interrumpe el propio funcionamiento de cada persona, tales interrupciones es a lo que se conoce como resistencias pues a lo que se resiste el sujeto es a darse cuenta de las necesidades que organizan su conducta.

La misión como terapeutas de la corriente gestáltica es ayudar a las personas a darse cuenta de los obstáculos que lo bloquean y a superarlos dejando que la naturaleza siga su curso, de tal manera que el individuo pueda actuar haciendo pleno uso de sus capacidades. El terapeuta no ayuda directamente a resolver problemas, sino que ayuda a restablecer las condiciones bajo las cuales el sujeto puede hacer mejor uso de su propia capacidad para la resolución de sus problemas.

Por otra parte el terapeuta inspecciona de qué manera el individuo evita tomar contacto con su realidad, con cuestiones presentes que restan importancia orgánica para el individuo. La intervención en terapia se hace a través de lo inmediato, a lo que se percibe, al lenguaje corporal. Sin embargo esto no quiere decir que se interpreta tales situaciones, sino que trabaja con sensaciones, con el cuerpo del sujeto, hace que se responsabilice de sus actos, sensaciones y emociones, ejemplo de esto es:

“Yo me doy cuenta en el aquí y el ahora de que actúo de tal modo” de la respuesta de ésta depende el camino que tome la terapia.

Ahora bien, la terapia Gestalt resulta eficaz para manejar conductas neuróticas, autodestructivas, así como para mover y encaminar la energía humana hacia un desarrollo autónomo y creativo, por lo que es una técnica que se utiliza en niños, adolescentes, adultos. 

Finalmente como se ha mencionado en otros artículos, este tipo de procesos llegan a ser dolorosos emocionalmente, en el presente, pero si se modifica de una manera positiva el presente, el futuro será más positivo, pues los resultados obtenidos en el presente, perdurarán por un largo tiempo, siempre y cuando se haga un buen manejo de las situaciones en las que se vive día a día.

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